La infidelidad provoca un intenso dolor emocional, genera sentimientos de ira, vergüenza, culpa, miedo, incredulidad, desesperanza, traición, etc. A pesar de todo eso no tiene que significar el final de la relación de pareja, es posible reconstruir la relación.
La infidelidad es uno de los temas que más pueden interesar a la mayoría de las personas, ha sido objeto de canciones, poemas, películas, libros, estudios de todo tipo, pero sobre todo parece que forma parte de ese inconsciente colectivo en donde abarca desde la fantasía hasta el deseo y desde luego una buenas dosis de realidad impregnada de verdades a medias, secretos y mentiras. La infidelidad es un tema de orden moral, religioso, social y psicológico. La infidelidad se puede dar de dos formas:
La primera se entendería como un contacto sexual que mantiene una persona con alguien que no es su pareja establecida y reconocida ya sea en forma legal o, de hecho. En este apartado se establecerá la infidelidad cuando el hecho sea consumado, puede haber muchas ideas relacionadas con esto, pero cuando hay sospecha, duda, desconfianza o no se tiene algún tipo de evidencia implica más una situación individual que de pareja. De tal manera que esto si influye en la manera en que se va a tratar en terapia.
La segunda es cuando un miembro de la pareja mantiene una relación donde comparte tiempo, emociones, sentimientos, comunicación, intercambios de detalles, afectividad o romance con otra persona que no es su pareja primaria y lo mantiene en secreto.
Cualquiera de los dos tipos de infidelidad puede provocar sentimientos negativos en quien es la parte afectada del miembro infiel. Además de que los efectos que se provocan en la relación de pareja suelen ser negativos.
La infidelidad es un proceso complejo ya que influyen tanto las percepciones y motivaciones individuales, como factores sociales, familiares y sexuales, estos determinan los antecedentes y las consecuencias. Las consecuencias emocionales después de descubierta pueden ser muy variadas en cada uno de los miembros de la pareja. La infidelidad es un tema que se puede trabajar tanto en terapia individual como de pareja. A su vez también es un detonador de miedos, fantasías infantiles, creencias y aprendizajes que algunas veces intervienen en el tratamiento.
Cuando la infidelidad se descubre, la vida de ambos miembros de la pareja cambiara para siempre. Puede surgir una sensación de derrumbe, del todo ya término y hasta después surgir la pregunta de si la relación y uno mismo pueden sobrevivir a eso. Este es un tema que realmente puede poner a prueba la pareja, hay una sensación de traición y de desconfianza que afecta la totalidad de la relación.
La separación no tiene que ser la única opción tras de una infidelidad, solo se necesita una adecuada asesoría y el tiempo suficiente para sanar y reconstruir la relación de pareja.
¿Qué hacer cuando se descubre la infidelidad?
El descubrimiento puede generar una serie de emociones, desde la ira, shock, hasta una fuerte indiferencia entre otras, incluso es un disparador para la depresión y para las ideas suicidas e intentos de suicidio. En un instante se puede tener la sensación de querer terminar con la relación de pareja y al siguiente toda la intención de salvarla.
Despúes del shock inicial se puede experimentar una rumiación constante de pensamientos, una división interna en cuanto a la toma de desiciones y cambios de humor que no es fácil controlar.
Lo más importante es cuidar la salúd física y mental, por lo que es importante encontrar ayuda profesional. Es importante poder expresar tus pensamientos y sentimientos, pero hay que tener cuidado a quien le compartes lo que estas viviendo.
La importancia de en quien confías lo que esta pasando
Lo primero es encontrar un apoyo adecuado, un terapeuta, quizá un sacerdote, consejero, amigo o alguien en que se pueda confiar y que la persona se sienta cómodo para hablar de lo que está pasando y como se está sintiendo, sin embargo, es importante evitar a personas que tomaran partido ya que pueden intensificar las sensaciones que se sienten.
Lo siguiente es darse un poco de tiempo antes de hablar con su pareja de la situación, quizá no sea un adecuado momento para intentar solucionar este conflicto y probablemente en esos instantes ni siquiera se sepa que es lo que se quiere. Esto es más fácil escribirlo que hacerlo, ya que se vive una confusión de emociones después del shock inicial.
Detectar los indicadores que aparecen y que anuncian que la situación se puede salir de control, incluso detectar si se están desarrollando síntomas físicos, o ideas que puedan parecer irracionales, en estos momentos es importante buscar ayuda profesional.
Como reconstruir la relación dr pareja
No en todos los matrimonios en donde ha habido una infidelidad tienen como fin la separación. Algunas de las veces ya existen otros factores o problemas que han estado guardados por algún tiempo y que salen con la infidelidad. En ocasiones la separación se ha estado generando desde hace mucho tiempo, por muy doloroso que esto pueda ser es importante reconocerlo.
Aquí es importante separar las responsabilidades de la situación que se está viviendo. Una cosa es la responsabilidad compartida de los problemas que existen en la relación de pareja y otra la responsabilidad de quien toma la decisión de ser infiel.
Más si ambos miembros de la pareja a raíz de la infidelidad, después de que se recupera quien la ha vivido, lo quieren se puede reconstruir su relación de pareja. Cuando se han revisado las afectaciones a la relación y de los problemas que surjan de ella solo deben comprometerse en la reconstrucción de su relación.
Si ambos están motivados para hacerlo y tienen la fuerza y la energía para emprender esta tarea, los resultados como personas y como pareja pueden ser grandes y muy positivos. Entre ellos está el establecer una relación de pareja diferente formada a partir de la confianza y del respeto, una relación que crecerá en honestidad, intimidad y respeto.
Ambos miembros de la pareja deben de tener la paciencia necesaria, primero para la recuperación individual y después para sanar su relación de pareja.
Los pasos a seguir para rescatar tu relación en pareja
Primeramente, ponerle fin a la relación extramarital o extra-pareja que se está teniendo, lo que incluye dejar todo contacto con la otra persona. Lo anterior solamente si se ha optado por la continuidad de la relación de pareja.
Hacerse responsable de la infidelidad y de las consecuencias que se generan, ya que en algunos casos se intenta culpar a la pareja de la infidelidad y sin duda esto no traerá resultados positivos para iniciar una nueva relación.
Establecer objetivos pequeños en pareja, en realidad no hay un “borrón y cuenta nueva”. Reconstruir la relación va a llevar tiempo, por lo que es necesario tener paciencia, olvidar no es perdonar, de igual manera que ignorar no es mejorar. En un principio las emociones están latentes y se pueden disparar ante muchas situaciones en la relación.
Buscar ayuda profesional, aunque los consejos y opiniones de familiares y amigos pueden e intentan ser positivos, la ayuda profesional está encaminada a encontrar resultados. Un terapeuta puede ayudar a encontrar las dificultades individuales y de pareja que interfieren en la reconstrucción de la relación.
La intervención del profesional permite también identificar los problemas que se generaron en torno de la infidelidad y trabajar con ellos. Esto permite encontrar los indicadores que permiten prevenir cualquier otra situación de este tipo, de esta manera la pareja se prepara para identificar sus problemas y prevenirlos.
Establecer un compromiso de tiempo y acciones antes de tomar cualquier decisión negativa. Es importante entender que durante el proceso alguno puede perder la motivación y la energía, por lo que es importante establecer una red de apoyo en la misma pareja.
Llegado el momento hablar de la infidelidad con su pareja. Cuando se restablezca la comunicación adecuada o ante la presencia de un terapeuta que facilite el proceso, ya que no se puede ignorar o ser indiferente ante un evento como este.
Respetar el tiempo y ritmo de cada miembro de la pareja, en ocasiones el que engaña está ansioso por que el otro supere la situación. La sanación lleva un proceso.
Finalmente, el perdón y la reconstrucción de la pareja. Todo tiene un tiempo y un proceso, solo el compromiso puede llevar a la pareja a reconstruir una nueva relación cimentada en la confianza, seguridad y respeto.
En algunas ocasiones le pregunto a las parejas en terapia “¿Qué los ha mantenido juntos hasta este momento?”. Las respuestas recibidas son muy variadas, más la mayoría hacen a referencia al amor. Cuando aún existe el componente del amor, entonces se puede establecer un proyecto de pareja. Cuando hay amor tanto hombres como mujeres están en posibilidades de perdonar una infidelidad. El perdón no es un acto de voluntad solamente, es algo que se quiere y se siente y que no necesita ser apresurado. Se trata un acto espiritual, psicológico y corporal, se percibe en la totalidad de la persona.